26 de febrero de 2025 - 4:08 PM
ECONOMÍA | Artículo por PhD Dennis Iván Rodas Anzueto
dennisrodas@gmail.com


La competitividad local se refiere a la capacidad de una región, ciudad o comunidad para generar y mantener un entorno económico favorable que permita el crecimiento sostenible de sus empresas, la creación de empleos y la mejora del bienestar y calidad de vida de su población.


Lo anterior requiere infraestructura y conectividad, capital humano, entorno empresarial favorable, innovación y tecnología, acceso a mercados, instituciones eficientes y sostenibilidad ambiental; sin embargo, existen varias razones que reflejan la importancia de contar con territorios competitivos, entre ellas:


Impulso al desarrollo económico, mediante la generación de empleo y la atracción de inversión. 

Fortalecimiento de sectores productivos, por ejemplo, agroindustria y turismo 

Reducción de migración y pobreza, puesto que, si hay más oportunidades laborales y desarrollo económico local, menos personas se ven obligadas a emigrar a la capital o al extranjero en busca de mejores condiciones de vida.

Infraestructura y conectividad, como mejores carreteras, acceso a electricidad confiable y conectividad digital que son esenciales para el crecimiento económico de la región.

Innovación y educación, fortaleciendo la educación técnica y universitaria en la región permite que la fuerza laboral se adapte a los cambios tecnológicos y productivos, lo que aumenta la competitividad general.


Una mayor competitividad en el suroccidente guatemalteco puede transformar la región en un motor de crecimiento, reducir la desigualdad y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. A continuación, la posición que ocupan los departamentos según el índice de Competitividad Local.



La mayoría de los departamentos se encuentra con competitividades medias o bajas, lo que requiere esfuerzos importantes en pro de la mejora de este indicador. Los siguientes cuadros muestran los datos de los diferentes municipios, en donde ya se establecen disparidades más evidentes.






Mejorar la competitividad local en el suroccidente de Guatemala requiere un enfoque integral que abarque infraestructura, educación, acceso a financiamiento y fortalecimiento del sector productivo. Las estrategias clave incluyen:


Infraestructura y conectividad: carreteras y transporte, energía y agua, digitalización. 

Desarrollo del capital humano: educación técnica y universitaria, capacitación en tecnología, fomento del emprendimiento. 

Acceso a financiamiento: créditos para PYMEs, fondos de inversión local, banca digital y cooperativas.

Fortalecimiento del sector productivo: innovación agrícola, industria y manufactura, turismo sostenible. 

Marco regulatorio y gobernanza: simplificación de trámites, seguridad y Estado de Derecho, alianzas público-privadas.